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"¡¡¡Madre mía!!!", estas fueron nuestras palabras cuando   nos trajeron a estos diez pequeños y abandonados cachorritos, pero a la vez, también pensamos en que había que sacarlos adelante como fuera,   primero porque no se merecían lo que les habían hecho, dejarlos en un camino en cajas de cartón cerradas, desnutridos y deshidratados, asustados y desamparados, y segundo, porque cuánta vida había dentro de   aquellas frías cajas, cuánta vida por vivir, por descubrir...

Al abrir las cajas, solo vimos esperanzas, ilusiones y agradecimiento al chico que los recogió y a la protectora por cuidarles.

Y ahora estos tiernos y achuchables peques, mientras que se van   recuperando y cogiendo fuerzas, solo tienen un deseo: que les adoptes,   que les des el hogar y la familia  que merecen, que les ayude a vivir una vida plena y digna, ¿te animas?

Sus nombres son: Alabama, Arizona, California, Georgia, Indiana, Nebraska, Colorado, Maine, Wyoming y Washington.