Los Posts de los PETSmaniacos sobre Mascotas (Perros y Gatos)
Ir a indice de Posts
¿Cómo afectan las alergias primaverales a los perros?
Seccion: Alergias
Por © PETSmana
Para los alérgicos la primavera puede resultar una tortura, durante esta estación del año los estornudos, molestias nasales y congestión no se hacen esperar convirtiéndose en un gran problema. Pero los seres humanos no son los únicos que sufren estas consecuencias, también los perros pueden ser alérgicos a ?la primavera?.
Para los alérgicos la primavera puede resultar una tortura, durante esta estación del año los estornudos, molestias nasales y congestión no se hacen esperar convirtiéndose en un gran problema. Pero los seres humanos no son los únicos que sufren estas consecuencias, también los perros pueden ser alérgicos a “la primavera”.
Las alergias ambientales, también denominada atopia, son la segunda causa más común de picazón en la piel de los perros, después de la dermatitis alérgica por pulgas. Aunque es difícil saber exactamente cuántos perros sufren de atopia, estudios recientes estiman que un 10% de la población canina la padecen.
Según la Dr. Nicole Eckholm, dermatóloga certificada por la Pet Emergency and Specialty Center of Marin en San Rafael, California, los perros pueden tener alergias durante todo el año. Dicho esto, continúa: "Yo diría que definitivamente hay un aumento de las alergias estacionales durante los meses de la primavera, verano y otoño."
Según Eckholm, mientras que los perros con alergias de invierno pueden presentar sensibilidad a cosas como mohos y ácaros del polvo, las alergias más comunes diagnosticadas en la primavera son las malas hierbas, árboles y polen de gramíneas.
Una gran diferencia entre las alergias ambientales en los seres humanos y en los perros son los síntomas que se presentan. Mientras que la mayoría de gente asocia las alergias primaverales a la fiebre del heno que afecta a la nariz y a los ojos, en los perros no se manifiesta exactamente igual.
"Los síntomas en ojos, fosas nasales y estornudos sí se manifiestan en los perros, pero son signos clínicos menos comunes," dice Eckholm. "Los signos clínicos más comunes asociados con las alergias estacionales en los perros están asociados con picazón en la piel e infecciones en el oído. Los sitios más comunes donde se producen picores son las patas, cara y orejas".
Eckholm hace hincapié en que las alergias son una condición crónica para toda la vida, pero los veterinarios tienen muchas herramientas en sus arsenales para gestionar el problema. "Las alergias estacionales no se puede curar, pero se pueden manejar con éxito en la mayoría de los casos," dice ella.
El primer paso es el diagnóstico de atopia, se deben descartar otras afecciones como la dermatitis por pulgas, alergia a los alimentos u otras condiciones que pueden provocar síntomas similares. Una vez determinada la atopia, Eckholm recomienda recurrir a las vacunas para la alergia (conocidas como desensibilización o inmunoterapia) como primera línea de defensa.
Sin embargo, cabe señalar que no todos los perros responden a este tratamiento. Varios estudios de atopia canina muestran que alrededor del 60% de los perros afectados logran buenos resultados gracias a la inmunoterapia.
Para los perros que no responden a las vacunas contra la alergia o para los propietarios que prefieran otras vías, existen medicamentos para aliviar la atopia. "Estos medicamentos van desde los antihistamínicos a más potentes inmunomoduladores," dice Eckholm. Cada uno tiene ventajas y desventajas y la respuesta puede variar de un perro a otro, por lo que es importante utilizar siempre los medicamentos bajo la prescripción de un veterinario con el fin de obtener los mejores resultados.
Para los alérgicos la primavera puede resultar una tortura, durante esta estación del año los estornudos, molestias nasales y congestión no se hacen esperar convirtiéndose en un gran problema. Pero los seres humanos no son los únicos que sufren estas consecuencias, también los perros pueden ser alérgicos a ?la primavera?.
Para los alérgicos la primavera puede resultar una tortura, durante esta estación del año los estornudos, molestias nasales y congestión no se hacen esperar convirtiéndose en un gran problema. Pero los seres humanos no son los únicos que sufren estas consecuencias, también los perros pueden ser alérgicos a “la primavera”.
Las alergias ambientales, también denominada atopia, son la segunda causa más común de picazón en la piel de los perros, después de la dermatitis alérgica por pulgas. Aunque es difícil saber exactamente cuántos perros sufren de atopia, estudios recientes estiman que un 10% de la población canina la padecen.
Según la Dr. Nicole Eckholm, dermatóloga certificada por la Pet Emergency and Specialty Center of Marin en San Rafael, California, los perros pueden tener alergias durante todo el año. Dicho esto, continúa: "Yo diría que definitivamente hay un aumento de las alergias estacionales durante los meses de la primavera, verano y otoño."
Según Eckholm, mientras que los perros con alergias de invierno pueden presentar sensibilidad a cosas como mohos y ácaros del polvo, las alergias más comunes diagnosticadas en la primavera son las malas hierbas, árboles y polen de gramíneas.
Una gran diferencia entre las alergias ambientales en los seres humanos y en los perros son los síntomas que se presentan. Mientras que la mayoría de gente asocia las alergias primaverales a la fiebre del heno que afecta a la nariz y a los ojos, en los perros no se manifiesta exactamente igual.
"Los síntomas en ojos, fosas nasales y estornudos sí se manifiestan en los perros, pero son signos clínicos menos comunes," dice Eckholm. "Los signos clínicos más comunes asociados con las alergias estacionales en los perros están asociados con picazón en la piel e infecciones en el oído. Los sitios más comunes donde se producen picores son las patas, cara y orejas".
Eckholm hace hincapié en que las alergias son una condición crónica para toda la vida, pero los veterinarios tienen muchas herramientas en sus arsenales para gestionar el problema. "Las alergias estacionales no se puede curar, pero se pueden manejar con éxito en la mayoría de los casos," dice ella.
El primer paso es el diagnóstico de atopia, se deben descartar otras afecciones como la dermatitis por pulgas, alergia a los alimentos u otras condiciones que pueden provocar síntomas similares. Una vez determinada la atopia, Eckholm recomienda recurrir a las vacunas para la alergia (conocidas como desensibilización o inmunoterapia) como primera línea de defensa.
Sin embargo, cabe señalar que no todos los perros responden a este tratamiento. Varios estudios de atopia canina muestran que alrededor del 60% de los perros afectados logran buenos resultados gracias a la inmunoterapia.
Para los perros que no responden a las vacunas contra la alergia o para los propietarios que prefieran otras vías, existen medicamentos para aliviar la atopia. "Estos medicamentos van desde los antihistamínicos a más potentes inmunomoduladores," dice Eckholm. Cada uno tiene ventajas y desventajas y la respuesta puede variar de un perro a otro, por lo que es importante utilizar siempre los medicamentos bajo la prescripción de un veterinario con el fin de obtener los mejores resultados.
Nota: © PETSmana no se responsabiliza de la informacion u opiniones vertidas en estos posts o noticias ni tiene por que estar de acuerdo con su contenido.