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¡Los gatos también se deprimen!
Seccion: Salud en General
Por PETSmania
La depresión o tristeza no es solo de humanos, también puede ser experimentado por los felinos. Los gatos pueden presentar cambios de conducta que puede ser pasajero, pero si cambia repentinamente sus hábitos, hay que llevarlo de inmediato al veterinario.
La depresión o tristeza no es solo de humanos, también puede ser experimentado por los felinos. Los gatos pueden presentar cambios de conducta que puede ser pasajero, pero si cambia repentinamente sus hábitos, hay que llevarlo de inmediato al veterinario.
Muchas personas piensan que por ser los gatos tan independientes, que nada les importan, pero están errados, los gatos son animales sociales y afectivos, y son muy susceptibles a los cambios de ánimo, y ésta es una de las principales causas que pueden dar origen a que su carácter varíe.
La depresión felina es "un comportamiento anormal en el cual el gato muestra un cambio en la actividad, un cambio en la vocalización y generalmente una disminución del apetito", según Katherine Houpt, directora de la Clínica de Comportamiento Animal de la Escuela de Medicina Veterinaria de Cornell University. Ella cree que esa depresión "no es muy común, o al menos no se reconoce como tal, como un gato tranquilo y menos activo no molesta al dueño".
Cuando un gato está triste o deprimido, se muestra apático, tiene decaimiento, e inapetencia. Puede dejar de asearse, o de utilizar el arenero para hacer sus necesidades, así como estar mucho tiempo debajo de la cama o del sofá.
Puede ser ocasionado por una mudanza, cambio de familia, pasar demasiado tiempo solo que puede ocasionar que esté desorientado y triste, la llegada de un nuevo bebé, o de otros gatos ya que ellos son muy territoriales. La pérdida de un ser querido o simplemente puede estar padeciendo de una enfermedad.
Según Roger Catalán, veterinario asesor de Purina ONE, existen dos factores que pueden explicar esa actitud:
El gato ha vivido algún episodio de tipo traumático que pueda haber alterado su bienestar, generándole estrés o ansiedad.
La presencia de una enfermedad que aún no se ha manifestado mediante otros síntomas.
Si el veterinario ha descartado alguna patología, de esta manera puedes volver animar a tu gato:
- Muéstrale afecto, que se sientan queridos. Trate de pasar más tiempo con él.
- Proporciónale un ambiente agradable.
- Ten juguetes, cajas de cartón, peluches, para que se distraiga.
- Hay que estimularlos con las actividades que más les guste.
- No lo regañes por cualquier cosa.
En fin, si notas que tu gato no es el mismo de antes y has tratado de reanimarlo y no lo has conseguido es recomendable acudir a un veterinario especialista en comportamiento animal —o etólogo— para que pueda estudiar sus comportamientos y tratarlos debidamente.
La depresión o tristeza no es solo de humanos, también puede ser experimentado por los felinos. Los gatos pueden presentar cambios de conducta que puede ser pasajero, pero si cambia repentinamente sus hábitos, hay que llevarlo de inmediato al veterinario.
La depresión o tristeza no es solo de humanos, también puede ser experimentado por los felinos. Los gatos pueden presentar cambios de conducta que puede ser pasajero, pero si cambia repentinamente sus hábitos, hay que llevarlo de inmediato al veterinario.
Muchas personas piensan que por ser los gatos tan independientes, que nada les importan, pero están errados, los gatos son animales sociales y afectivos, y son muy susceptibles a los cambios de ánimo, y ésta es una de las principales causas que pueden dar origen a que su carácter varíe.
La depresión felina es "un comportamiento anormal en el cual el gato muestra un cambio en la actividad, un cambio en la vocalización y generalmente una disminución del apetito", según Katherine Houpt, directora de la Clínica de Comportamiento Animal de la Escuela de Medicina Veterinaria de Cornell University. Ella cree que esa depresión "no es muy común, o al menos no se reconoce como tal, como un gato tranquilo y menos activo no molesta al dueño".
Cuando un gato está triste o deprimido, se muestra apático, tiene decaimiento, e inapetencia. Puede dejar de asearse, o de utilizar el arenero para hacer sus necesidades, así como estar mucho tiempo debajo de la cama o del sofá.
Puede ser ocasionado por una mudanza, cambio de familia, pasar demasiado tiempo solo que puede ocasionar que esté desorientado y triste, la llegada de un nuevo bebé, o de otros gatos ya que ellos son muy territoriales. La pérdida de un ser querido o simplemente puede estar padeciendo de una enfermedad.
Según Roger Catalán, veterinario asesor de Purina ONE, existen dos factores que pueden explicar esa actitud:
El gato ha vivido algún episodio de tipo traumático que pueda haber alterado su bienestar, generándole estrés o ansiedad.
La presencia de una enfermedad que aún no se ha manifestado mediante otros síntomas.
Si el veterinario ha descartado alguna patología, de esta manera puedes volver animar a tu gato:
- Muéstrale afecto, que se sientan queridos. Trate de pasar más tiempo con él.
- Proporciónale un ambiente agradable.
- Ten juguetes, cajas de cartón, peluches, para que se distraiga.
- Hay que estimularlos con las actividades que más les guste.
- No lo regañes por cualquier cosa.
En fin, si notas que tu gato no es el mismo de antes y has tratado de reanimarlo y no lo has conseguido es recomendable acudir a un veterinario especialista en comportamiento animal —o etólogo— para que pueda estudiar sus comportamientos y tratarlos debidamente.
Nota: PETSmania no se responsabiliza de la informacion u opiniones vertidas en estos posts o noticias ni tiene por que estar de acuerdo con su contenido.
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