Primeros auxilios para socorrer a los perros.

Los expertos en el campo de la veterinaria recomiendan a los dueños de animales domésticos aprender algunas nociones básicas de primeros auxilios para minimizar los daños en caso de que la mascota sufra un accidente.

A continuación, algunas pautas que pueden salvar la vida de tu mascota en las situaciones límites.

Lo primero es aprender a mantener la calma. Los canes tienen la capacidad de detectar los estados de ánimo de las personas y pueden saber si su dueño se encuentra alterado, lo que provocará que él también se sienta inestable. Se debe acudir al centro veterinario más cercano cuanto antes y siempre con serenidad.

En el caso de tratarse de quemaduras leves, se debe lavar la zona con agua y aplicar después una pomada especial para quemaduras, finalmente se procede al vendaje. Jamás hay que vendar la quemadura sin aplicar antes el producto, pues sería contraproducente. Si la piel se inflama y aparece líquido subcutáneo, tenemos que acudir rápidamente al veterinario.

Por otro lado, los perros son animales susceptibles a las altas temperaturas, por lo que conviene saber cómo actuar frente a un golpe de calor. Para ello, es necesario bajar la temperatura corporal del perro con baños de agua no demasiado fría. Si está consciente, debemos animarle a beber para que no se deshidrate. También será necesario la intervención de un especialista lo antes posible.

En cuanto a la asfixia, es común que los perros ingieran objetos extraños. Primero se debe intentar extraer el objeto que provoca la asfixia abriendo la boca del animal y tirando de su lengua hacia afuera. Si esto no funciona habrá que levantar sus patas traseras, de manera que el perro tosa y el objeto caiga por sí mismo. Hay que mantener al animal de esta postura (sin levantarle nunca del suelo) y tratar de tranquilizarle para que respire relajadamente, para que aquello que obstruye las vías salga expulsado.